Con una escalera hecha de luz resquebrajada
me llamarás a tu nuevos lechos
y seré 20000 flores
bailando con el viento.
He temido el día
en que el ultimo aliento
invadiera
la atmósfera.
Temí que los pajaros dejearan de cantar
que las plantas dejen de florecer
y que el cielo sólo sea el fondo
de un escenario
sin obras.
Pero las tormentas se han sincronizado
con tu partida.
Una habitación donde guardar puertas.
Armadura de vitreaux.
La aurora fluye a travez de esta ventana cutre
y refracta tus colores
sobre gris
y machimbre,
entra en mis ojos
y arenga a mis pupilas
a verlo todo con tus colores.
Durmiendo a través del tornado
sueño con las nubes
convirtiéndose en pequeños pájaros,
una fuerza infinita,
que levanta árboles
y los lleva lejos,
tan lejos,
que los árboles no saben
el idioma.
He visto todo lo que debía ver,
lo que necesitaba ver
y lo que no.
Meta-benevolencia.
Un enjambre de perlas
en un lugar de un desierto
brillando para nadie
ni siquiera siendo imaginadas.
Liberado de todo lazo afectivo
trasciendo este plano
como una manifestación alquímica
nacida de tus lagañas.
Ruinas sintientes de un granero
que ha revitalizado ganados enteros.
Resignador/Alucinaciones.
Una porción de lo obvio,
Llueven las palabras que siempre nos dijimos
en el silencio de un beso.
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